martes, 19 de junio de 2012

Moonrise Kingdom


Moonrise Kingdom (2012)

Duración: 94 min. Director: Wes Anderson. Guión: Roman Coppola, Wes Anderson. Música: Alexandre Desplat. Fotografía: Robert D. Yeoman. Reparto: Jared Gilman, Kata Hayward, Bruce Willis, Edward Norton, Bill Murray, Frances McDormand, Tilda Swinton, Jason Schwartman, Bob Balaban, Harvey Keitel.
Años 60. La huida de dos jóvenes amantes: Sam, aprovechando un campamento scout, y Suzy, escapándose de casa, lleva a sus familias, policía y amigos, a salir en su búsqueda, por toda la isla. Así quedarán de manifiesto viejos rencores y ocultas relaciones románticas, entre algunos de los personajes que participan en la investigación.
Una “extraña” película del director Wes Anderson, al que le gusta indagar en la mente infantil,   con sensibilidad, atemporalidad y estética cuidada. Excentricidad, aventura y un mundo especial, que sólo puede salir de la imaginación de un niño.  Esa es la carta de presentación del director de “Los Tenenbaums” y “Viaje a Darjeeling”. Unos niños, diferentes, con pocas habilidades sociales, enamorados de su propia rareza, de su forma diferente de entender el mundo. Se han encontrado, de pronto, en un mundo complejo, en el que no encajan, y al que no quieren pertenecer. Dos almas gemelas, que desean ser uno, fusionarse. Por ello, se escapan, para vivir su apasionado amor, con toda la inocencia posible. Una playa, un fuego junto a la tienda de campaña, y la lectura de un libro, que los une para siempre. Desarrollarán un viaje iniciático para conocerse, para vivir una aventura en la que sólo existan ellos. Una fábula entre “Romeo y Julieta” y “Peter Pan”, con paralelismos de “Blancanieves”. Sam, un niño que no quiere crecer, pero que pretende experimentar vivencias de adulto. Un Peter Pan vestido de boyscout con gafas de pasta, blandiendo su escopeta de perdigones, para rescatar a su princesa, Suzy. Ella, una cenicienta atrapada, incomprendida, rara. Las referencias son muchas, y muy complejas, como siempre ocurre con éste director, y con el otro guionista, un miembro de la saga familiar Coppola, Roman Coppola.
El reparto, un lujo… La presencia de Bill Murray, como sufrido padre y esposo, un pequeño papel, que deja huella. Edward Norton, increíble, en su personaje de jefe scout, entre ridículo y adorable. Frances McDormand y Bruce Willis, sensacionales. Sobre todo Willis, al que cada día le sienta mejor su madurez, y que aporta los silencios y penumbras de un hombre solitario y perdido en el mundo. Por supuesto, los niños, Jared Gilman y Kata Hayward: Entrañables, tiernos, excéntricos, sin caer en lo absurdo.
Una historia distinta, que no dejará indiferente a nadie. Personajes excéntricos, sólo al principio, familiares después, con muchos puntos de conexión con el espectador. Un film, en el que Wes Anderson, refleja una vez más, la reivindicación de la infancia y preadolescencia. La negación a madurar, a crecer, a seguir los cauces esperados, a ser etiquetado en la sociedad. Un alegato, también, de la lectura y los discos de vinilo.  Intimista, plena de afecto y excepcionalmente única.
Guillermo Pérez Pérez y Enrique Pérez Tudela
  

jueves, 7 de junio de 2012

Ray Bradbury: Fahrenheit 451

Por siempre, libros. Lamentablemente, el 5 de junio murió Ray Bradbury, a los 91 años. Nos hemos quedado bastante huérfanos de literatura. No puede haber nada más triste para nuestro mundo, que la desaparición de escritores como Bradbury, quien aportó un universo especial, crítico, en el que conjugaba ficción científica, con altas dosis de sensibilidad. Existen numerosas referencias de su mundo, en películas, cómics, novelas, teatro… Pero, hemos elegido una novela adaptada al cine por François Truffaut.

Fahrenheit 451 (1966)  

Duración: 108 min. Director: François Truffaut. Guión: François Truffaut & Jean-Louis Richard (Ray Bradbury). Música: Bernard Herrmann. Fotografía: Nicolas Roeg. Reparto: Julie Christie, Oskar Werner, Cyril Cusack, Anton Diffring, Jeremy Spenser, Alex Scott.

Fahrenheit 451, es la temperatura a la que arde el papel, los libros… Guy Montag, un disciplinado bombero encargado de quemar los libros, prohibidos por el gobierno, conoce a una revolucionaria maestra que se atreve a leer. De pronto, se encuentra transformado en un fugitivo, obligado a escoger no sólo entre dos mujeres, sino entre su seguridad personal y su libertad intelectual. Muestra una sociedad vacía, manipulada por los medios de comunicación, dependiente de "medicamentos" estimulantes, sumergidos en el hedonismo, con el patrocinio del Estado. François Truffaut, arriesgó con una propuesta visual sencilla, elegante, valorando más el mensaje que los aspectos técnicos. Sin embargo, cualquier revisión de la película, no soporta la comparación con el cine actual. Tanto la estética, como los efectos especiales, “bomberos” que parecen un “playmobil”, o coches parecidos a los juguetes “Lego”, desfases con el “zoom” de la cámara, o la presencia excesiva del color rojo, no merecería atención para cualquier espectador con menos de 25 años. Cualquiera que vea este film, con algo de reflexión crítica, y dejándose llevar, entenderá que el fondo gana a la forma. Una fábula de cómo las armas del totalitarismo, son la ignorancia y la manipulación. Truffaut, nos conciencia del gran legado que poseemos con los libros, la cultura. Proclama que la felicidad consiste en ignorar todo lo desagradable del mundo. Sin sufrimiento no hay posibilidad de cuestionar el sistema. En el reparto, una guapa Julie Christie, como la rebelde que, leyendo, desafía al sistema, y Oskar Werner, como el “quema-libros”, ambas interpretaciones llenas de emoción y matices. A principio de este siglo, Mell Gibson, planteaba hacer una segunda versión, pero consideró que había quedado desfasado el tema, con la existencia de internet y del universo digital. Estamos convencidos de que esta novela, y su correspondiente película, no podrán estar nunca desfasados, dado que la censura, la imposición de una determinada línea de pensamiento, el dominio de lo audiovisual, o una nueva inquisición, siempre son posibles sin conocimiento, sin libros… Un film interesante, que debería remover conciencias, crear un germen de libertad, recuperar el interés por leer, esforzarnos en crear imágenes mentales, y no sólo consumir imágenes prefabricadas.

viernes, 1 de junio de 2012

Take Shelter


Take Shelter (2011)

Duración:123 min. Director: Jeff Nichols. Guión: Jeff Nichols. Música: David Wingo. Fotografía: Adam Stone. Reparto: Michael Shannon, Jessica Chastain, Shea Whigham, Katy Mixon, Kathy Baker, Lisa Gay Hamilton.
Curtis LaForche, vive en un pequeño pueblo de Ohio, con su mujer, Samantha, y su hija Ana, una niña sorda de seis años. Curtis, comienza a sufrir sueños extraños y fuertes alucinaciones de carácter apocalíptico. Unas alucinaciones, que no sabe si son consecuencia de una enfermedad mental, o se trata de premoniciones reales. Su mujer y su hija viven al margen de los sucesos.
Tras pensarlo seriamente, Curtis decide construir un refugio para tormentas en el patio trasero de su hogar. Sus continuas  visiones/revelaciones,  hacen cada vez más anormal su comportamiento, con su familia y la relación con sus allegados. Curtis temerá descubrir la verdad. No sabe si el refugio es para proteger a su familia de la tormenta, o de sí mismo.
“Take Shelter”, ha cosechado numerosos premios internacionales, entre ellos, Premio de la Semana de la Crítica de Cannes, en su pasada edición. Ante todo, es un film enigmático, una mezcla entre el drama psicológico, y el thriller apocalíptico.
Deja desconcertado al espectador… Como producto de cine independiente, la intriga, durante la película es constante, no se desvelan los acontecimientos con claridad, tendremos que descifrar el mensaje a la salida del cine.
Este film, remite, sin lugar a dudas, al director Shyamalan, que plantea siempre aspectos de lo sobrenatural o paranormal, como es el caso de  “El incidente”. Por supuesto, el referente más claro es la especial, y, aún hoy, enigmática “Encuentros en la tercera fase”, de Steven Spielberg, en 1977. Algo más cercana al mundo de “Take Shelter”, con ciertos paralelismos, es “Donny Darko”, (Richard Kelly, 2001), película que recomendamos encarecidamente visionar, y rogamos sugerencias para entenderla. Algo que pasará con el film de esta semana.
El director y guionista Jeff Nichols, con “Shotgun Stories”, se colocó en el panorama del cine independiente más descarnado. Sin buscar conclusiones morales, sólo reflejando un momento, un instante concreto. En esta película, apuesta por lo intimista, y lo turbio. Una metáfora sobre la incomunicación y la crisis financiera, mostrando su impacto en la sociedad. Sin olvidar que deja un trasfondo religioso por valorar, sin juicios temerarios, pero que está presente en el film.
El reparto, posee unos actores entregados al director, sobre todo Michael Shannon, que aporta una personalidad muy especial al personaje principal. Conviene destacar a Jessica Chastain, que hace de contrapunto, de contraste, meritoriamente.
Un film sorprendente, con una potencia visual que arrastra, penetra, y hace posible la intriga más allá de los diálogos, o los propios protagonistas de la historia. Tampoco podríamos dejar de mencionar que la banda sonora de David Wingo ejerce un papel muy importante para acompañar la tensión y la evolución de la trama. Quizá la única objección es que el director al final de la película, no sabe muy bien cómo terminarla. Aunque la experiencia merecerá la pena durante dos horas.