jueves, 2 de agosto de 2012

El Irlandés

El Irlandés (The Guard, 2011)

Duración: 96 min. Director: John Michael McDonagh. Guión: John Michael McDonagh. Música: Calexico Fotografía: Larry Smith  Reparto: Brendan Gleeson, Don Cheadle, Liam Cunnigham, David Wilmot, Rory Keenan, Mark Strong, Fionnula Flanagan, Dominique McElligott, Sarah Greene, Katarina Cas, Pat Shortt, Darren Healy, Laurence Kinlan, Gary Lydon.
Un policía irlandés, poco ortodoxo, se ve forzado a colaborar con un agente del FBI, para investigar un asunto internacional, relacionado con el tráfico de drogas. Un asesinato poco corriente, en un lugar pequeño, donde nunca ocurre nada. Un policía atípico. Una población pequeña de Irlanda, en la que todo el mundo vive metido en su casa, sin pocas relaciones sociales.  El pub y el fútbol son los únicos lugares para relacionarse. En un ambiente tan cerrado, un policía de color no es bienvenido.
Nominada en los Globos de Oro a la categoría de mejor comedia, y ganadora en los premios BAFTA con el premio al mejor Guión, por fin llega este film a nuestras carteleras.
El director, John Michael McDonagh, se estrena con una obra cargada de auténtico cine, habiendo tomado nota de los grandes directores, tanto de comedia, como de cine negro. Es difícil no acordarse de “Fargo”, de los hermanos Coen, en algunas escenas, e incluso la estética de algunos momentos de “Pulp Fiction”, o los diálogos de  “Reservoir Dogs”, ambas de Quentin Taranttino. Un guión y dirección impecables, en los que los pequeños errores técnicos no son evidentes, ni hacen desmerecer el conjunto. Un ritmo narrativo complejo: Acelera, para, coge impulso y vuelve, se detiene, e irrumpe en estallidos. Todo ello, con varias historias dentro de la narración principal, múltiples matices, y el debate sobre la moralidad, bien versus mal.
Brendan Gleeson, como policía irlandés, realiza una actuación brillante, sin fisuras, donde el personaje, es amado y odiado a la vez. Muestra que, pese a no recaer en él papeles protagonistas, y hacer de eterno actor de reparto, posee magia y un brillo especial en la pantalla. Llena cada secuencia con su mirada, el silencio que provocan sus comentarios, la tosquedad que encarna, la sobriedad…, y, sin embargo, una elegancia que intimida. Héroe o villano, inmerso en una comedia sorprendente. No sabríamos encontrar otro actor que pudiera defender la doble moral del personaje, con la misma convicción. Don Cheadle, como agente del FBI, encarna todo lo contrario del policía irlandés. La prestancia de quien posee la razón, la verdad, los conocimientos, y unos principios irrenunciables, a prueba de sobornos. Es la oposición al protagonista. Aunque al final de la película, el espectador comprobará que no están tan alejados como se pudiera pensar. Un actor  sobradamente conocido por sus papeles en películas de acción, (“Traffic” de 2000), y series televisivas, (“Picket Fences” de 1992). En esta ocasión realza su profesionalidad, destacando que bien pudiera ser considerado para papeles de mayor carga dramática.
Impresionante película, que ha tardado en llegar a España, y que lo hace en unas fechas vacacionales no muy proclives a que nos acordemos de acudir a las salas de cine. Si tienen la oportunidad, no lo duden. Sin duda, es una de las mejores películas del año. Aunque al no ser políticamente correcta,  desafortunadamente, no permanecerá mucho tiempo en cartelera.