jueves, 1 de octubre de 2009
Destino: Woodstock
Destino: Woodstock (Taking Woodstock) 2009
Duración: 110 min. Director: Ang Lee. Guión: James Schamus, sobre un libro de Elliot Tiber y Tom Monte. Música: Danny Elfman. Fotografía: Eric Gautier. Reparto: Henry Goodman, Liev Schreiber, Emile Hirsch, Demetri Martin, Jonathan Groff, Imelda Staunton, Jeffrey Dean Morgan, Eugene Levy, Paul Dano, Dan Fogler, Mamie Gummer, Zoe Kazan.
Versión libre del nacimiento del festival más famoso de la historia: “Woodstock”. A modo de comedia desenfadada, el film relata, más que el propio desarrollo del festival, cómo surgió la idea de hacer un concierto para recaudar fondos y solucionar una deuda familiar. Guión firmado por James Schamus, se basa en la novela/memorias de Elliot Tiber: Historia de un joven, que tuvo que volver a su pueblo para hacerse cargo del hotel de su familia. Tuvo un importante papel involuntario, para que el Festival de Música y Arte de Woodstock, en 1969, fuera un acontecimiento histórico. Al enterarse de que en un pueblo vecino han retirado la autorización para que se celebre un festival hippie de música, llama a los organizadores pensando que puede ser la ocasión de revitalizar el hotel. Tres semanas después, medio millón de personas se dirigen hacia la granja de su vecino, en White Lake, para participar en "los tres días de paz y música", que definieron a toda una nueva generación.
Ang Lee, director de ”El banquete de boda” (1993) y “Comer, beber, amar” (1994), nos presenta “Destino: Woodstock”. Esta comedia recupera para las nuevas generaciones el mítico concierto. Aunque, dado que existe una de las mejores grabaciones en cine de un concierto, “Woodstock 1970”, Lee no ha arriesgado y se ha centrado en la intrahistoria, en los preparativos, recreándose en los pequeños detalles que pudieron pasarse por alto, con cierto tono nostálgico. De hecho, no recurre a grabaciones de la época, o a la citada película, para rellenar metraje.
Lo mejor de la película, sin dudarlo, son la cantidad de personajes surrealistas que desfilan, acompañando al protagonista. Henry Goodman, interpreta a Elliot Tiber, en ocasiones ligeramente soso, pero hay escenas (LSD) que provocan carcajadas eternas. Por otra parte, Liev Schreiber (quien veremos en “Salt”, junto a Angelina Jolie, próximamente), tan camaleónico como de costumbre, hace una muy buena interpretación de un travesti, rellenando algunos “huecos” del protagonista.
La banda sonora no puede eludir a los grandes: Doors, Jannis Jopli, Hendrix, The Who y Santana, entre otros. Una maravilla.
Ang Lee se desenvuelve mejor en tonos dramáticos, o en historias en las que el humor es más fino. Sin embargo, sale airoso y tiene recursos de gran director, aunque está un poco más torpe/descuidado en la dirección, quizá lo requiera el género.
“Destino: Woodstock” es una simpática, entretenida e ingeniosa película que nos transporta a los años 60, con toda la carga que supone el 40 aniversario de este gran evento.